Índice ambiental.
Época de siembra (temprana o tardía/segunda). Ambos suponen escenarios diferentes, cada uno con requerimientos genotípicos particulares:
Su elección permite obtener un determinado rendimiento potencial u objetivo, a modo de
minimizar los riesgos ambientales durante el período crítico (etapa del desarrollo del cultivo en que
la ocurrencia de estrés genera una pérdida irreversible de rendimiento.)
PERÍODO CRÍTICO: 30 DÍAS CENTRADO EN LA FLORACIÓN
(-15 alargamiento de estigmas, 0 fecundación de ovarios, +15 cuaje de granos).
Las siguientes condiciones de la cama de siembra, ayudan a una germinación y emergencia de forma homogénea.
Considerarlas minimiza pérdidas causadas por variabilidad temporal del canopeo.
Temperatura del suelo: depende, fundamentalmente, de su contenido de humedad, de la cantidad y distribución del rastrojo.
Temperaturas menores implican una mayor duración de la etapa siembra - emergencia exponiendo a la semilla al ataque de plagas y enfermedades.
Temperatura óptima: ≥10° C hasta los 5cm de profundidad
Promedio durante 3 a 5 días consecutivos. Se recomienda su determinación a media mañana para capturar la Temperatura mínima diaria (efecto inercia).
Humedad del suelo: debe ser de al menos 65–70% de la capacidad de campo (cantidad máxima de agua retenida por un tipo de suelo).
Minimizar la competencia desde la emergencia del maíz, es crucial para evitar disminuciones en el crecimiento inicial. Un adecuado monitoreo de plagas permite prevenir y tomar decisión de control según umbrales de daño.
El nitrógeno es uno de los principales factores de crecimiento que limita el rinde en maíz. Se requieren al menos 150 kg N totales ha-1 (suelo + fertilizante) para maximizar el rendimiento. Un correcto diagnóstico inicial es el puntapié hacia el éxito del cultivo.
Utilizar semilla tratada profesionalmente con insecticida y fungicida, permite proteger al cultivo de insectos y hongos.
Evita daños en las semillas que puedan afectar la correcta emergencia e implantación del cultivo (variabilidad espacial) y minimiza el desgaste de la sembradora.
Recomendamos colocar la semilla a una profundidad de 3,8 a 5 cm para el óptimo desarrollo de raíces.
Mantener una velocidad constante para lograr una correcta distribución espacial de las semillas y así evitar variabilidad espacial del canopeo.
Máxima recomendada: 6 A 7 km/h.
Hagamos un uso responsable de la tecnología. El refugio es una herramienta clave para disminuir la presión de selección de resistencia de insectos a las proteínas Bt. Recomendamos sembrar un bloque del 10% de la superficie total del lote.
Agrisure Viptera® es una marca registrada de una compañía del Grupo Syngenta